Algo se rompió definitívamente en nuestra cabeza el día, hace unos diez años, que catamos los vinos naturales de la bodega Barranco Oscuro, procedente de las Alpujarras.
@barrancooscuro
@vinosautenticos.es
De golpe, estos vinos de la familia Valenzuela nos invitaban a apreciar la imperfección de la naturaleza. Uvas que se presentaban desnudas para enseñaros a disfrutar su realidad existente, y olvidarnos de añorar aquello que faltara.
La bandera de los vinos naturales ya no la hemos soltado en Montia. Nuestra apuesta por estos vinos habla de como somos, como vivimos y como cocinamos.
Y todo empezó una tarde, gracias a la familia Valenzuela.